martes, 20 de noviembre de 2012

Otro Continente!


El 6 de Noviembre decidimos poner rumbo a Marsaxlokk (al Sur-Este de Malta) y esperar allí la buena ocasión para cruzar hasta Túnez. Dejamos Malta con la intención de explorar mejor sus bonitas costas en otra ocasión, aunque nos vamos muy contentos por dejar atrás un país donde la comida nos ha decepcionado profundamente! El viernes 9 de Noviembre levantamos el ancla y pusimos proa a... África!
180 millas, 24 primeras horas a motor sin apenas una pequeña brisa que hinchara nuestras velas y las restantes 24 horas con una fuerza de entre 6 y 7 en la escala de Beaufort entrando por babor. Sabíamos que durante la madrugada del segundo día estaríamos muy cerca de la costa tunecina pero nos llevamos una decepción con las primeras luces... Solo se veían las olas tan majas que nos habían estado meciendo durante toda la noche y ningún indicio de tierra en el horizonte. Verificamos en el ordenador que en dos horas tendríamos que estar tocando la costa así que continuamos nuestro rumbo. De echo, entre las olas, la neblina existente y la poca altura de este país no pudimos ver tierra hasta que estuvimos bien cerca de ella.
Lo más duro fue poder llegar hasta la bocana del puerto de Monastir ya que había que esquivar unos bajos y cuando nos dimos cuenta estábamos a unas 15 millas al Nord-Este de nuestro destino y con el viento en aumento viniendo de la dirección de nuestro destino. Nos pasamos el día entero haciendo bordos y alcanzamos por fin nuestro objetivo a las 1800 horas del 11 de Noviembre.

Lo primero que hay que hacer al llegar a Túnez es informar a la policía de la llegada del barco al igual que si se quiere salir a navegar un rato o si se decide avanzar hacia otro lugar del país. Vinieron a inspeccionarlo (todo correcto) y nos pidieron 10 Dinar (unos 5€) por un sello oficial para los documentos, aunque parece ser que tal sello “no existe”... El viento siguió subiendo durante la noche y decidimos mover el barco del muelle de recepción hasta un pantalán donde quedaba bien al abrigo. Allí nos encontramos a la familia del Skaf y a un montón más de barcos habitados por franceses cargados de niños, un belga y una pareja de australianos. Todos ellos hacen una pausa durante los meses más tormentosos del año, algunos pasarán estos meses en el barco y otros regresan a su país de origen durante un cierto tiempo. Bomberos retirados, circenses, informáticos, banqueros, diseñadores... El ambiente es muy agradable y la verdad es que se agradece el poder charlar e intercambiar opiniones con todo el mundo! Llegamos en el momento perfecto, durante los siguientes cuatro días hemos tenido vientos que no han bajado de entre 40 y 50 nudos acompañados de lluvias y tormentas eléctricas... Que bien se está en la camita oyendo aullar el viento fuera y sabiendo que podemos dormir a pierna suelta!


Hicimos una simpática excursión organizada por el puerto y, como no, los franceses nunca zarpan sin su botella de vino!


Habitantes del Skaf, Diego y Francesca


Niños de todos los colores nos atropellan continuamente!


Thibault y Charlotte alucinando con las manualidades de Olivier...

Aquí se obtiene un buen precio para poder sacar el barco del agua y así renovar la pintura anódica de la obra viva, la comida es buena y económica y la gente es agradable y se habla francés. Decidido, pasaremos el fin de año por la zona y también aprovecharemos para visitar el interior.

domingo, 4 de noviembre de 2012

Recalada fugaz en Malta

Malta está compuesta por tres islas, Malta, Comino y Gozo de Este a Oeste, siendo la primera la más grande de las tres. Nos sorprendió mucho la primera vez que escuchamos hablar el maltés, tiene una sonoridad muy arabesca y, por supuesto, no se entiende nada! Por suerte tienen como segundo idioma oficial el inglés, tienen el volante a la derecha y comen “fish & chips”... Cómo añoramos la buena comida Siciliana! El nivel de vida y los precios se pueden comparar a los de Barcelona, aunque gran parte del turismo náutico parece estar orientado a mega-yates.


Callejeando por la Valletta


No están mal las vistas de nuestra terraza, verdad? (la Valletta)


Somos conocidos por "los que tienen el chinchorro raro"...


Saludos!


Visitando con nuestros amigos del "Arrache coeur"

Estos días no nos hemos movido a penas del barco porque hemos tenido vientos bastante fuertes y hemos preferido quedarnos por si alguna amarra del barco fallaba. Estamos cogidos a la boya de una marina abandonada en la parte Oeste de la Isla Manoel (Sliema), en el resto de esta zona está permitido anclar pero es bastante profundo y está minado de boyas y barcos de todo tipo. Hemos aprovechado estos días de clausura para arreglar el asunto del tormentín y la fijación de la balsa salvavidas y charlar con nuestro vecino Alex, un ucraniano muy interesante que lleva recorriendo el Mediterráneo en solitario desde hace tres años con su espectacular trimaran “Gulfstreamer”.


El "Gulfstreamer"


El maestro de la resina ataca de nuevo

Hemos decidido dejar la visita de Malta para otra ocasión y en breve pondremos proa a Túnez para pintar la obra viva del casco allí, es mucho más económico que en zona europea. Zarparemos en pocos días, en cuanto el viento nos sea favorable!