Después de haber trabajado todo el verano en Menorca pusimos rumbo hacia Premià de Mar a finales de Octubre. Hephaïstos pasará el invierno fuera del agua para poder hacerle un mantenimiento profundo y alguna que otra reforma.
Estos dos años y medio de trotamundos del mar nos han despejado de cualquier tipo de duda: navegar es nuestra forma de vida. Como en cualquier tipo de situación, siempre hay momentos buenos y momentos no tan buenos, pero estos últimos siempre se olvidan muy rápido! Decidido: en cuanto estemos listos continuamos hacia el Oeste.
Aunque según el tamaño de mi barriga parece ser que el viaje lo continuaremos con un pequeño grumete...
¡Época de transformaciones!